jueves, 13 de junio de 2013

China, Nicaragua y San Andrés

San Andrés, Bogotá y China 

       La vehemente reacción del presidente Santos al conocer el veredicto final del Tribunal de la Haya sobre el diferendo limítrofe entre Colombia y Nicaragua es solo un gesto estudiado con espejo y asesores profesionales, porque en realidad le importa un bledo. Los del altiplano han recibido la responsabilidad de unas fronteras lejanas y ajenas a su realidad, a las que manosean con torpeza y sin conocimiento de causa. El montañero es un hombre como cualquiera, trabajador y buena gente, pero que la selva y el llano le son ajenos, así como las costas y los mares. El mar para ellos es una bella postal de viaje, en donde habitan pececitos de colores.




     El manejo que Bogotá le ha dado a sus fronteras caribes es, por decir lo menos, desganado. En nuestra historia no hemos ganado una solo batalla. Primero fue Panamá, luego Los Monjes, los mares de San Andrés y quien sabe que más vendrá en el futuro.

      La idea que hemos sostenido en este sitio es que los países conformados después de la independencia de España eran artificiales, que unía caracteres diversos solo por la necesidad de acceso al mar de la metrópoli. La tierra era un planeta con algunos estados bien definidos que se disputaban el resto del territorio. «Se trataba de una época en la que el poder político estaba basado sobre la Marina» afirma Abelardo Forero Benavides. Luego en estos territorios fueron surgiendo sentimientos nacionalistas. En este contexto, el istmo de Panamá desde siempre se percibía a sí mismo como una unidad nacional, pero al independizarse de España, debido a la «pobreza general que reinaba en el país» como explica Eduardo Lemaitre, «no estaba en condiciones de sostenerse como nación soberana, ni mucho menos de defender su independencia. Había, pues, que elegir un tutor. ¿Cuál de ellos? 



     «Los aspirantes eran tres. México en primer lugar. Luego Perú. Y Colombia, en fin». La razón por la que finalmente terminó formando parte de Colombia fue «sin duda, la gloria de Bolívar y de su reciente epopeya, que los tenía enceguecidos…». Pero Panamá nunca fue un típico departamento colombiano, como actualmente se percibe. «…no fue más que una necesidad temporal, mientras el país, separado física y temperamentalmente el mundo andino cuyo epicentro está en Bogotá, crecía y se hacía apto para asumir el manejo de sus propios intereses y para sobrevivir de modo independiente. 

      Pero es indudable para el historiador de nuestros días que el istmo de Panamá habría podido seguir integrado a Colombia solo con que Teodoro Roosevelt hubiera sido un poco más generoso y comprensivo (sic)…y que en Colombia el gobierno hubiera sido menos negligente e inepto, su Senado menos soberbio y sus partidos menos torpes». El crecimiento económico y el nivel de vida logrado por Panamá confirman que romper lazos con Bogotá era el camino correcto. Confirma, además, que zapatero a tus zapatos, los del altiplano al cerro, los costeños al mar. 


      Bogotá no aprendió, el manejo que dio al asunto de San Andrés fue también negligente e inepto. A Santos le estalló entre las manos y tendrá que cargar con eso, pero los gobiernos anteriores solo aplazaban las decisiones para salvar su periodo, sin importarles un pepino la gente de las costas y los mares. Cosa diferente si se hubiese tratado de sus propios linderos. Bogotá acaba de entregar otros cien mil kilómetros de patria costeña. Pero aún no han terminado. 


     La organización para la cooperación y el desarrollo económico (OCDE), que agrupa al mundo industrializado, estima que China se convertirá en la primera potencia mundial en 2016. Los países desarrollados miran a largo plazo, nosotros nos miramos el ombligo. Una mirada a 2060: Una visión global del crecimiento a largo plazo, un informe de la OCDE, estima que la economía China elevará su peso de 17% al 28% del total, lo que la convertiría en la primera potencia económica, al menos. Pero China quiere primacía, como ha dicho Jean-Marie Colombani: va a adoptar una línea cada vez más nacionalista y dominadora o se inscribirá más en un juego mundial de interdependencias… 

      Amigos míos, «hacer augurios a largo plazo no resulta una tarea sencilla» pero nos pueden coger «asando mazorcas». Este planeta no ha evolucionado tanto como creemos, pese a que ya tenemos aviación aun «Se trata de una época en la que el poder político está basado sobre la Marina» y Demetrio Korsi sigue teniendo razón con respecto a Panamá: 


 «Republiquita microscópica 
 ombligo del mapamundi 
 brújula de la eternidad 
 punte de la conquista 
faro entre la inmensidad… 
¿No veis el futuro humano 
por esta ventana universal? 
“Pro Mundi Beneficio” 
(¡qué barbaridad!)».
 

 Lo que digo es que China tendrá que poner en balanza si paga por pasar por el canal o si cobra. No es del todo descabellado pensar en un gobernador de ojos rasgados aquí al lado. Luego mirarán al Darién y un poco más allá, y Bogotá, inepta y negligente, negociará con los chinos: amigos del caribe colombiano prepárense para hablar chino. Y esto no es un cuento chino, ya el gobierno está tramitando leyes para tenencia de tierra para extranjeros.


República Caribe

Introducción Desde siempre hemos fantaseado con la posibilidad de una nación caribe, hemos soñado una nación propi...