lunes, 24 de junio de 2019

República Caribe



Introducción




Desde siempre hemos fantaseado con la posibilidad de una nación caribe, hemos soñado una nación propia que glorifique nuestra esencia, la manera como llevamos nuestras vidas, la forma como expresamos el amor, nuestras tradiciones ancestrales, el rigor que le imponemos a la lengua de Cervantes, las vastas manifestaciones culturales y todos los valores de nuestra raza, pero en la mayoría de las ocasiones lo hacemos de manera informal y casi siempre en forma de broma.

Los grandes horizontes nos han hecho abiertos y receptivos, nuestra propia raza es una amalgama de sangre diversa, hemos caminado hombro a hombro con nuestros vecinos y con visitantes de todas las latitudes. Particular deferencia tenemos con nuestros hermanos andinos, con quienes hemos caminado durante varios siglos, atravesado momentos históricos difíciles y a quienes hemos recibido siempre con agrado y comprensión, sin reclamar para nosotros lo que por naturaleza se nos ha dado.  Pero ha llegado la hora de abordar el tema de manera más objetiva y consiente, dado que nuestra realidad social y los cambios del mundo contemporáneo así lo exigen.

El propósito de este trabajo no es plantear verdades absolutas, sino, por el contrario, abrir un debate alrededor del tema. Sin embargo, una verdad simple e irrefutable, documentada en las estadísticas oficiales, es que la Región Caribe es la zona más pobre y atrasada de Colombia. Esta realidad cobra significado en el sufrimiento de millones de seres humanos, en la oportunidad perdida de varias generaciones y, en general, en la falta de una vida digna para la mayoría de los habitantes de este territorio.

La teoría que defendemos es que el enorme atraso de la región es debido al tipo de instituciones políticas que tenemos y a la supeditación de un centro de desarrollo alejado de nuestro centro gravitatorio. Que el desarrollo de Colombia ha sido desigual, en detrimento de las regiones más distantes de Bogotá y dentro de este orden la costa caribe ha sacado la peor parte. Que este orden de cosas es una herencia colonial y que no tiene justificación a la luz de las ciencias políticas y sociales actuales. Que mientras se mantenga este orden de cosas no habrá posibilidades de allanar las diferencias entre el centro y la periferia. Que si la costa caribe emprendiera una vida nacional independiente, con nuevas reglas de juego, podría lograr mejores niveles de desarrollo humano.

Pero, ¿es realmente posible y pertinente pensar en una nación caribe? ¿Tiene algún asidero histórico, social, político, económico o filosófico? ¿No es una trampa de la historia para avivar la crónica violencia nuestra? ¿Es otra causa nacionalista solo para satisfacer egos y beneficiar a unos pocos? ¿O tal vez sea una salida elegante y oportuna a muchos de nuestros problemas? En los siguientes párrafos trataremos de dar respuesta a estos interrogantes.

2 comentarios:

  1. Carta de Juan Jose Nieto a Santander reinvindicando los intereses costeños frente al interior del país: http://manglar.uninorte.edu.co/calamari/bitstream/10738/103/3/BDC359.pdffederalismo.pdf

    ResponderEliminar

República Caribe

Introducción Desde siempre hemos fantaseado con la posibilidad de una nación caribe, hemos soñado una nación propi...